Ni la lluvia los para. Claro, con el Mundial a la vuelta de la esquina, hay que entrenar cada jornada para afinar la máquina de cara a la cita máxima en Chile. Entonces, más allá que el clima no dejó utilizar los campos de juego del Complejo N° 1, los Juveniles se pusieron las zapatillas y partieron rumbo al gimnasio de futsal para realizar el primer trabajo de la jornada.
Luego de una entrada en calor a cargo del profe Roberto Luzzi, el entrenador, Miguel Ángel Lemme, tomó el silbato y dividió a los futbolistas en tres equipos: con pecheras rojas, amarillas y negras, se enfrentaban en cancha y el que convertía el primer gol, seguía en el parquet. Toques, movilidad, lujos. Los mundialistas demostraron sus habilidades y, de paso, dejaron bien lustado el suelo de madera.
En el turno de la tarde, los chicos salieron a la cancha para darle a la pelota todo el entrenamiento: primero fue una entrada en calor con conceptos técnicos, para luego darle paso a un ejercicio táctico con la redonda como protagonista. Para finalizar, hubo ejercicio de definición.
Este miércoles, los Juveniles volverán a practicar en doble turno. Por la tarde, si el tiempo acompaña, se jugará un amistoso contra la selección Sub 17 de Nigeria.