Siempre adelante. Ese es el lema del plantel argentino. Un grupo de jugadores que sigue haciendo todo para que la Albiceleste pueda coronarse con un título. Y al igual que en 2015, el Seleccionado estuvo a un paso de gritar campeón. Esta vez fue en la Copa América Centenario, que se disputó a mediados de 2016 en los Estados Unidos.
Con Gerardo Martino en el banco, Argentina mostró un poder de fuego que arroyó a todos los rivales: el estreno fue con victoria 2-1 ante Chile. A continuación, y con el regreso del capitán Messi, que aquella noche en el Soldier Field de Chicago se despachó con un hat trick, batió 5-0 a Panamá. En el último partido del grupo, Bolivia no fue rival y se vio superada por 3a 0. En cuartos de final, otra goleada más acrecentó las esperanzas del público: fue 4-1 a Venezuela en Boston. ¿Y las semis? Otro póker más para Argentina, esta vez ante el dueño de casa, Estados Unidos. Por tercer año consecutivo, la Albiceleste aterrizaba en el duelo final. A pesar de que se repitió la derrota en los penales ante el conjunto chileno, el mundo futbolero aplaudió a un equipo que mostró sus ganas de seguir dejando todo por la camiseta nacional.
En la previa a los Juegos Olímpicos de Río, por decisión personal, Martino dejó de ser el entrenador. Ante la cercanía del torneo Sub 23 a jugarse en Brasil, Olarticoechea asumió el cargo. Protagonista del Grupo D, la Selección debutó con una caída ante Portugal (0-2). Luego se recuperó al vencer 2-1 a Argelia y el 1-1 en el tercer duelo ante Honduras no le permitió avanzar a la siguiente ronda.
Una nueva etapa comenzó el 1 de agosto de la mano de la llegada de Edgardo Bauza al banco de Argentina. El Patón, de gran experiencia y ganador en su paso por diferentes clubes del continente, buscará depositar al Seleccionado en la próxima Copa del Mundo que se jugará en Rusia.
¿Cuál fue el balance 2016 en las Eliminatorias? En marzo, Argentina visitó Santiago y superó a Chile por 2-1. Acto seguido, venció a Bolivia en el Mario Alberto Kempes (2-0). La siguiente doble fecha se disputó en septiembre, ya con Bauza como director técnico: en la misma cancha, el clásico ante Uruguay quedó para nuestra Selección, gracias al tanto de Leo Messi. A continuación, en Mérida, Argentina se repuso de un 0-2 ante Venezulea y rescató un punto. Ya en octubre, otro 2-2 apareció en escena: esta vez fue ante Perú en Lima. Luego, Paraguay superó al conjunto nacional en Córdoba (1-0). En la última doble jornada, de noviembre, la Albiceleste pasó del 0-3 ante Brasil al 3-0, en San Juan, frente a Colombia. Con un Messi en estado de gracia, que anotó el primer tanto de tiro libre y asistió en las otras dos conquistas, la Selección terminó el año en la quinta posición de la tabla: suma 19 unidades y está a sólo un punto de Ecuador y Chile.
El calendario ya se modificó. Presentes en el 2017, Argentina buscará mantener el protagonismo que refleja el ranking de la entidad madre del fútbol mundial. En los últimos nueve meses, la FIFA estacionó al Seleccionado como la mejor de su clase. Rumbo al 2018 y cuando restan seis fechas para cerrar la clasificación mundialista, es un buen augurio.
