Córdoba tiene el calor del hogar para el Seleccionado Nacional, que con el triunfo ante Bolivia lleva nueve partidos oficiales sin perder en esa provincia, con ocho victorias y una igualdad.
El partido con el que Argentina comenzó su racha de victorias fue en 1980, cuando superó 5-0 a Suiza. Y la historia continuó 15 años después cuando, en 1995, se impuso ante su par de Perú por 1 a 0.
A partir de allí, la Selección Nacional siguió sumando más gritos de gol: en 1998, en un amistoso internacional, Argentina le supo ganar a Bosnia Herzegovina, también por 5 a 0. Un año después, el rival cambiaría pero no así el triunfador. Con un ajustado 2-1 nuevamente los jugadores albicelestes cantaron victoria ante Colombia.
Tuvieron que pasar otros 10 años para que Argentina volviera a pisar suelo cordobés y ratificara su invicto. ¿El rival? Ghana, al que venció 2-0.
En 2011 fueron dos los encuentros que tuvieron a la Selección como protagonista: el primero, por Copa América, en donde el plantel albiceleste se impuso 3-0 a Costa Rica. El segundo fue el único empate que exhiben las estadísticas: 0-0 ante Brasil.
¿Y el último encuentro? Por las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014, Argentina logró sumar otros tres puntos al ganarle 3-1 a Paraguay, en el 2012.
Pero la historia no termina ahí, porque hay un dato curioso que une a la provincia con la Selección: en 1978, Argentina visitó Córdoba para medirse ante un seleccionado local, con motivo de la inauguración del estadio. El resultado fue 3 a 1 para los albicelestes. Leopoldo Luque y René Houseman gritaron para el combinado nacional. ¿Quién convirtió el tercer tanto? Mario Alberto Kempes, delantero que, meses después, sería una de las figuras de ese conjunto campeón del mundo y que prestaría su nombre al hogar que volvió a cobijar una gran alegría para la Selección.