Un centenar de simpatizantes cordobeses y de otros puntos del país se hicieron presentes en Córdoba para demostrarles su apoyo al conjunto dirigido por Gerardo Martino.  Y dicha muestra de afecto tuvo su retribución: con los capitanes Messi y Mascherano a la cabeza, ayer, todo el plantel bajó a la entrada del hotel Quirum a saludar a los fanáticos.



 

Hubo, entonces, repetidas selfies, firmas de autógrafos, besos, abrazos, y mucha buena onda de cara al partido. Las emociones se dieron en continuado. Porque en cada contacto los fanáticos exhibieron una comunión única con los representantes del elenco nacional. Y en la cancha el ida y vuelta fue muy fuerte. ¡Así, Argentina!