06/10/2015

Las semifinales, ese escollo insalvable

Egipto fue la sede del séptimo Mundial Sub 17, en 1997. Para clasificar, Argentina debía finalizar entre los tres primeros lugares del Sudamericano en Paraguay, disputado siete meses antes de la competencia ecuménica. Tras sortear con éxito el Grupo A que compartió con el local, Ecuador, Venezuela y Perú, la Albiceleste finalizó segunda detrás de Brasil en la Ronda Final y se aseguró su plaza en Egipto 1997.

Con un equipo integrado, entre otros, por Franco Constanzo, Cristian Grabinski, Gabriel Milito, Luciano Galletti y Ernesto Farías, Argentina quería acceder a su primera final en la historia. En el Mundial anterior, celebrado dos años antes en Ecuador, la Albiceleste había conseguido un meritorio tercer lugar luego de perder ante Brasil en semifinales y superar a Omán en el encuentro por el bronce.

La historia comenzó bien, con un empate 0-0 ante Ghana, y sendas victorias 1-0 frente a Costa Rica y 2-0 vs. Bahrain, que la colocaron en los cuartos de final. Sin embargo, otra vez Brasil la dejaría afuera. El resultado final fue de 2-0 con goles de Fabio Pinto.

Nueva Zelanda fue elegida sede del Campeonato Mundial 1999, del que no participó Argentina por quedar cuarta en el Sudamericano de Uruguay de aquel año. Todas los cañones, entonces, apuntaron a Trinidad y Tobago 2001. ¿Quiénes fueron parte de aquel gran conjunto nacional? Nada menos que Pablo Zabaleta, Javier Mascherano y Carlos Tevez, tres miembros de la actual Selección de Gerardo Martino.

El inicio del camino fue duro, ante Burkina Faso, consiguiendo un empate 2-2 en el tiempo adicional con gol de Maxi López. Con la posterior goleada 3-0 contra Omán (López, Tevez y Colace) y el triunfo frente a España por 4-2 (Colace, Lopez, Zabaleta y Aguirre) sacó pasaje para los cuartos de final. Otro equipo africano aguardaba: Mali.

El partido fue parejo y ambos tuvieron opciones para abrir el marcador. Pero fueron los africanos quienes lo lograron, por medio de Drissa Diarra, a los 35 minutos. Poco les duró la alegría, ya que en el siguiente ataque argentino, Gonzalo Rodríguez estableció la paridad. Mali sufrió una expulsión pero, aún así, mantuvo el 1-1 hasta el último minuto. Fue entonces que Mauro Fanari, quien había ingresado minutos antes, marcó el gol del festejado triunfo.

Ya en semifinales, y con la posibilidad latente de acceder a la primera final en un Mundial Sub 17, Argentina se aprestaba a medirse con Francia, verdugo de Brasil en cuartos. Tevez puso el 1-0 para Argentina que, quizás agotada por la trabajosa victoria ante Mali, no logró mantener la misma intensidad y fue superada por los europeos 2-1. Luego, la Albiceleste perdió 2-0 ante Burkina Faso y terminó cuarta. Debería esperar otros dos años para volver a treparse al podio.

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