Pablo César Aimar fue un diez elegante y de mucha calidad. Esa clase de jugadores que daban placer verlo jugar en una cancha, que le aportaban una gran belleza al juego a partir de su simplicidad a la hora de tocar una pelota.
Nacido en Rio Cuarto, Córdoba, realizó las Divisiones Inferiores en River, club en el que debutó en Primera en una derrota ante Colón en 1996. Al año siguiente, fue convocado por Néstor Pékerman para disputar el Mundial Sub 20 de Malasia. Allí, fue una de las grandes figuras del certamen y se consagró campeón.
En el plano local, tras la partida de Marcelo Gallardo al Mónaco comenzó a tener más minutos y a mostrar todo su potencial. En 1999 brilló y ganó el Apertura, formando una recordada dupla con Javier Saviola, el otro crack que por aquel entonces daba sus primeros pasos en el club de Núñez. Como si fuera poco, también obtuvo el Clausura, consagrándose bicampeón del Fútbol Argentino.
Sus grandes actuaciones hicieron que Marcelo Bielsa pusiera sus ojos en él y lo convoque a la Selección Argentina Mayor. Un día como hoy, pero del 2000, le marcó a Paraguay su primer tanto. Tras una buena jugada colectiva con Ariel Ortega y Hernán Crespo, definió de zurda ante la salida del arquero. El encuentro, llevado a cabo en el estado Monumental en el marco de las Eliminatorias para el Mundial 2002, finalizó 1-1. Con la celeste y blanca, en total, registró 52 encuentros y convirtió ocho tantos. Disputó dos Copas del Mundo (Corea y Japón 2002 y Alemania 2006), la Copa Confederaciones 2005 y dos ediciones de la Copa América, en 1999 y 2007.
Luego llegó su destacado paso por el Viejo Continente, donde dejó un gran recuerdo en distintos clubes. Primero en el Valencia, club en el que alcanzó un nivel muy destacado y obtuvo en dos oportunidades LaLiga, una Copa de la UEFA y una Supercopa de Europa. Tras un paso por el Zaragoza, arribó a Benfica y continuó con los éxitos: ganó una Primeira Liga y cuatro Copas de la Liga.
Tras un breve paso por el Johor Darul Takzim de Malasia, retornó a River, pero una serie de lesiones no le permitieron lograr la continuidad que deseaba y solo pudo jugar ante Rosario Central y frente a Liniers de Bahía Blanca, motivo por el cual decidió retirarse del fútbol. Sin embargo, años después, se dio el gusto de volver a vestir la camiseta de Estudiantes de su Rio Cuarto natal. El 23 de enero de 2018 disputó 50 minutos ante Sportivo Belgrano de San Francisco por la Copa Argentina.
En la actualidad, se desempeña como director técnico de la Sub 17 de Argentina. Allí, bajo una misma filosofía de juego, que une a todas las selecciones, guía y forma a distintos juveniles de todo el país. Un mentor para ellos, un maestro a partir de su constante trabajo, su experiencia y claridad a la hora de explicar conceptos.