Canadá 2007: la conclusión de un idilio que busca renacer

La Selección Argentina superó a República Checa por 2 a 1 y logró alzar su sexta Copa Mundial Sub 20.
Publicado: 26/07/2020

El elenco comandado por Hugo Tocalli cerró con broche de oro su participación en la Copa Mundial Canadá 2007 contra el mismo equipo que había enfrentado en la inauguración: República Checa. La gran final en Toronto, que no guardó semejanzas con el sobrio empate 0-0 en Ottawa de la primera fase, se convirtió en un festín futbolístico individual y grupal teñido de Celeste y Blanco.

El Seleccionado Nacional, en su paso por el Grupo E, además de la igualdad en su presentación, goleó 6-0 a Panamá y derrotó a Corea del Norte por 2 a 1, finalizando en primera posición. Ya en Octavos, dejó atrás a Polonia tras imponerse por 3 a 1. En Cuartos le ganó por la mínima a México, y en Semifinales superó ampliamente a Chile por 3 a 1.

El domingo 22 de julio, el estadio Nacional de Toronto abrió sus puertas para albergar la final entre los juveniles argentinos y checos. Tras un primer tiempo de marcador estático, la acción se hizo presente en el complemento. A los 60 minutos, el elenco europeo se puso en ventaja gracias al zurdazo de media vuelta de Martin Fenin, que superó a Sergio Romero. Pero la alegría le duró poco, ya que dos minutos después Éver Banega asistió a Sergio Agüero y así el delantero que en ese entonces militaba en Atlético Madrid ejecutó directo al primer palo del arquero. Cuando parecía que el alargue se aproximaba, tras un tiro de esquina, el elenco argentino jugó corto y Mauro Zárate clavó un derechazo al primer palo que sorprendió a la defensa y estableció el 2 a 1. A falta de cuatro minutos para que el reloj cese su cuenta, con claras muestras de cansancio en las figuras de los checos, la euforia de los argentinos denotaba que no habría cambios en el epílogo de la obra. El pitido del árbitro español Alberto Undiano Mallenco extinguió la contienda y desencadenó el grito de campeón que hoy, 13 años después, se sigue recordando. Como ocurrió dos años antes, la Selección Argentina volvió a instalarse en lo más alto, sin saber que aquella sexta conquista redondearía el último romance de la Albiceleste con la preciada copa modelo Sub 20. Eso sí, hasta la actualidad nadie osa competir con la vitrina nacional.




 

Contexto

Sergio Agüero se convirtió en la gran figura no sólo del equipo de Hugo Tocalli, sino también del certamen: fue titular en los siete partidos, convirtió seis goles y se quedó con el balón de oro y con el botín de oro como había ocurrido con Diego Maradona en 1979, Javier Saviola en el 2001 y su amigo Lionel Messi en el anterior Mundial, el de Holanda 2005.

 

La Selección Argentina llegó a esta Copa Mundial que se disputó en Canadá tras obtener la segunda posición en el Torneo Sudamericano jugado ese mismo año en Paraguay. Y la Albiceleste sabía que tenía un deber sobre su espalda: mantener el trofeo en casa. Así fue, y los medios de comunicación enaltecieron la última gesta dorada: “Argentina, la reina de las seis coronas”, tituló el portal web de la FIFA; “Argentina, de la mano del Kun, se consagró campeón del mundo”, subrayaron algunos rotativos del país.


Hoy, la ilusión se renueva con el proyecto de Selecciones Nacionales que encabeza la AFA. Los valores representados provienen de la época gloriosa.