Nicolás Otamendi, íntimo con AFA Play

Sergio Goycochea dialogó con el defensor de la Selección Argentina y el Manchester City en una nueva entrega de “Por amor a la camiseta”.
Publicado: 06/08/2020

“Cuando sos chico, tus primeros recuerdos de la Selección siempre son por televisión, ¿no? Sos un hincha más, puteas, te calentás. Una vez que fui haciendo mi camino empecé a acumular muchísimos recuerdos hermosos. Era increíble compartir vestuario con esos jugadores que yo miraba por TV. Es imposible olvidarse de esos momentos”. Nicolás Otamendi se ríe junto al Goyco. Bromean a la distancia de manera virtual y el defensor de la Selección empieza a forzar su memoria para revivir sus experiencias con la celeste y blanca. Las buenas y las no tanto…

 

-¿Cuál es tu primer Mundial de referencia? ¿El primero que recordás?
-Los primeros recuerdos que tengo de la Selección es mirando a Roberto Ayala. Por posición, por lo tiempista, por el salto. El no es tan alto pero tiene un timing que da gusto ver. Yo tampoco soy tan alto y trabajé muchísimo para mejorar el salto, para tener esa explosión.

-Te tocó llegar muy joven a la Selección
-Sí, con muy pocos partidos en Primera. En 2008 debuté con Tocalli, a los seis meses bajé a Reserva. En 2009 llegó Gareca, tuve la chance de mostrarme en la pretemporada, tuve buenos partidos y ahí el técnico me empezó a apreciar.

-¿En ese momento tomaste dimensión de lo que era vestir la celeste y blanca?
-Quizá ahora uno toma conciencia de lo que significa representar a un país. De más chico tenés otra personalidad y vivís las cosas de otra manera. Cuando vas creciendo y acumulando partidos, te vas dando cuenta el lugar en el que estás.

-Y viviste tantas cosas en todos estos años…
-Me han tocado buenas y malas. Quedar afuera de un Mundial es lo peor que le puede pasar a un jugador. Después las Eliminatorias también son muy complicadas. Con Diego nos tocó vivir una clasificación muy dura, hasta el último partido no sabíamos si íbamos a entrar.

-Decímelo a mí, que fui a repechaje después de un 5-0, ja
-¡Claro! Esas cosas son tremendas. Nos tocó atravesar las derrotas en las finales. Atravesamos diferentes entrenadores, que nos intentaban meter su idea de juego y el hambre de seguir ganando e intentándolo. Vivimos momentos complicados.

-¿Solo en nuestro país no valoramos el hecho de haber jugado tres finales?
-El argentino está acostumbrado a ganar, a ser el mejor, a no darse por vencido nunca. Eso es admirable por un lado, pero es difícil cuando no ven el esfuerzo que se hace en cada partido. Acá estamos para representar a nuestro país en las buenas y en las malas.

 

-¿Podés hacer una Selección de compañeros desde el 2009 para acá?
Meto un 4-4-2. A nivel compañeros, voy con Romero;  Zabaleta, Otamendi, Funes Mori y Heinze; Lucho González, Mascherano Di María Y Messi; Agüero e Higuaín. Un esquema un poco mentiroso igual, ja.


-¿Para qué estamos en esta nueva etapa de la Selección?
-
Se viene una etapa nueva donde hay futbolistas con mucho talento y muchas ganas. Las Eliminatorias son complicadas, no es lo mismo que jugar amistosos. Por el recambio que veníamos teniendo, tal vez la pandemia nos perjudicó mucho, pero lo importante es que el entrenador encontró una idea de juego. Jugadores que rinden muy bien donde lo hacen. Sé que no me puedo relajar porque los que vienen te comen, si quiero seguir estando convocado tengo que competir de igual a igual con ellos. Eso está buenísimo, te obliga a competir constantemente, aunque después lógicamente hay que volcarlo el día del partido.
 
-¿Qué harías por amor a la camiseta?
-Yo creo que no hay respuesta para eso. A veces se dice que vamos por obligación o porque nos citan y no es así. La Selección Argentina es representar a un país, que tu familia lo viva, que te vea con la camiseta. Representás a una familia, a un pueblo y la verdad que no hay palabras que describan la emoción que te genera lucir esta camiseta.

-¿Tenés ganas de volver al predio de Ezeiza?
-Si, obvio, es hermoso. Sentir ese ambiente es muy lindo. El predio es el predio. Uno que está hace tiempo y lo conoce, disfruta de todo: los entrenamientos, de ir a tomar mate a la utilería, de todo. El poco tiempo que estamos se disfruta y eso se extraña mucho.

 

 

Dejando a un lado los sentimientos y la pasión por la Selección, Nicolás también se presta para charlar de fútbol. Asegura que Zlatan es de los delanteros que más lo complicaron junto con Lukaku. Se queda con Neymar a la hora de elegir un extranjero para sumar a su equipo. Y cuenta sobre su actual DT: Pep Guardiola.

“Trabaja mucho al rival. Busca mucho las debilidades ajenas. Si las cosas salen como él te las plantea, tenés muchas posibilidades de lastimar donde él te marcó que el equipo adversario tiene debilidades. Si tengo que destacar una en particular me quedo con esa, como trabaja y estudia al rival”.

-¿Salir con un pelotazo es el último recurso que te da?
-Al defensor le remarca siempre que la salida con el balón es importantísima, porque es el ABC de todo. Pero en momentos donde no podés salir jugando y la tenés que revolear, te aplaude y te da la mano. Cuando se puede salir jugando y hay espacios se hace, pero cuando no se puede, y hay que tirarla lejos, también se hace y te felicita.

-En estos tiempos de pandemia, ¿jugar sin público es una desventaja para ustedes?
-Es hermoso jugar con público. Sentir la presión, tanto para el rival como para nosotros de una pelota divida donde la gente por ejemplo te levanta. Las circunstancias se dieron así, estamos viviendo una etapa complicada donde nos toca jugar a puertas cerradas, pero nuestra mentalidad está puesta en seguir avanzando. Nos gustaría jugar con público pero nos tenemos que amoldar a esta situación que nos toca actualmente.