Carina, nacida en Corrientes, emigró al Celemaster de Brasil en 2014 después de destacarse en Buenos Aires en San Lorenzo de Almagro y ganar los premios Jorge Newbery y Alumni, desde allí su fama irradió a todo el mundo, tanto que fue nominada como mejor jugadora del mundo en 2018, por el medio especializado Futsal Planet.
“Me siento muy cómoda en este grupo, el técnico me dio lugar para que pueda transmitir mi experiencia y las chicas me recibieron muy bien, ya compartí el plantel con algunas de ellas en la última Copa América y creo que todo ello va a sumar para hacer una buena competencia en los Odesur”.
Argentina participó de la última edición de la Copa América realizada en 2017 en Las Piedras, Uruguay, donde consiguió un tercer puesto. Con cinco jugadoras de esta Selección Carina compartió equipo en aquel torneo: Sol Domínguez, Nava, Florentín, Agostina Chiesa y Lorena Benítez, también estuvo Emi Mendieta, aunque no participó de la competencia por una lesión, todas buscarán tener revancha en esta competencia.
“Me parece que llegamos a los Odesur mejor que a la Copa América en Uruguay, física y anímicamente; un plantel joven, con chicas de 15 y 16 años, que es una buena edad para explotar en el Futsal. El año pasado teníamos un equipo con jugadoras de más experiencia, acá me parece que hay equilibrio y muchas chicas nuevas y en edad de dar un paso grande en el deporte, ellas lo escuchan al técnico y Nico ha sabido ver y aprovechar las virtudes que tenemos”.
En la Copa América Argentina terminó segunda en el grupo y le tocó enfrentar a Brasil, lo que la llevó a pelear luego por el tercer puesto y no enfrentar en semis Colombia ni Paraguay.
Sabemos que tenemos en Colombia, subcampeón en Copa América, un rival difícil y, aunque no está Brasil, que siempre es candidato, también está Paraguay, un equipo aguerrido con quien jugamos en la pretemporada de la Copa, luego están Bolivia y Perú, todos rivales con los que no hay que descuidarse.
Después de la Copa, en febrero, Núñez pasó por una operación de meniscos, a partir de ahí el técnico estuvo siempre atento a como iba evolucionando, para saber si llegaba para el torneo.
Luego de la operación Nico me llamó varias veces, para ver como evolucionaba, ahí me dijo que esperaba que llegara y que quería que fuese la capitana, que me veía con capacidad para hacerlo. Ser el capitán de tu selección es un sueño para todo jugador, no me cambia respecto como soy con el plantel, porque siempre fui de hablar, me gusta enseñar lo que aprendí, me gusta decir las cosas, en eso no me cambia ser capitana, el extra es llevar la cinta en el brazo, es un orgullo.